Dotar las máquinas de inteligencia artificial parecida a la humana es una voluntad desde hace más de medio siglo. Sin embargo, no ha sido hasta la última década cuando se está viviendo un auténtico boom de aplicaciones, gracias a la mejora de las redes neuronales, los avances en supercomputación y la disponibilidad de datos masivos.

En este escenario, Cataluña es uno de los territorios más bien situados mundialmente, pues los avances tecnológicos confluyen con un sistema de investigación y desarrollo robusto y maduro respecto a las tecnologías digitales. Buena muestra de esto es el reciente anuncio de Microsoft de crear un nuevo centro en Barcelona dedicado a la investigación y el desarrollo en aplicaciones de inteligencia artificial.

Cataluña es uno de los territorios más bien situados mundialmente, pues los avances tecnológicos confluyen con un sistema de investigación y desarrollo robusto y maduro respecto a las tecnologías digitales.

La Universitat Pompeu Fabra destaca en distintos ámbitos del conocimiento donde usa la IA como herramienta habitual en sus proyectos. Según un informe elaborado por la Dirección General de Promoción Económica, Competencia y Regulación de la Generalitat de Cataluña, la UPF ocupa el tercer lugar entre las entidades catalanas que hacen investigación e innovación en IA, solo por detrás de la UPC y empatada con el BSC-CNS.

Además, los desafíos que supone el uso de big data e IA requieren de nuevas propuestas formativas en el ámbito de grado y postgrado. En la UPF se es muy consciente de ello y ya se ha puesto manos a la obra. Son ejemplo de esto el máster universitario en Sistemas Inteligentes Interactivos o el nuevo grado en Ingeniería Matemática en Ciencia de Datos. –la primera promoción se ha graduado este mes de septiembre–, que quiere formar a los expertos que tendrán que extraer y procesar los datos que generamos, con el objetivo de crear servicios y aplicaciones para contribuir al bien común.